CREAR Y CRECER

 

CREAR Y CRECER

El universo se expande al infinito

mientras una mariposa inicia su vuelo.

Los pájaros siguen construyendo nidos

mientras los topos excavan bajo el suelo.

Todo sigue su curso y, a cada instante,

se abre una flor y muere una estrella,

nace un niño y se crea un diamante,

se cuentan leyendas en toda la tierra.

Rodeados de silencio o de bullicio

aparecen canciones y versos,

se escriben historias de mundos ficticios,

planetas y soles de otros universos.

Es tiempo de dragones y astronaves

que nos llevan a mundos nunca imaginados

para hacernos con ellos inmortales,

descubriendo dimensiones de lo humano.

Hilvanando ideas se tejen los cuentos

viviendo con la mente miles de aventuras

que muchos escuchan centrados y atentos

con el pie en el suelo, sin perder cordura.

Imaginar es crear y crecer sin parar

por dentro y por fuera sintiendo la vida.

Son como unas alas con las que volar,

sin perder raíces que evitan huidas.

Versos y cuentos, historias de ayer o de hoy

hilos que tejen un tapiz de visiones.

Que me descubren por dentro cómo estoy.

Cuando alguien escribe, nacen los lectores.

Es tiempo de dragones y astronaves

que nos llevan a mundos nunca imaginados

para hacernos con ellos inmortales,

descubriendo dimensiones de lo humano.

Crear nuevos mundos, vivir otros sueños

desvelar cuáles son mis problemas.

Vivir y sentir todos mis sentimientos,

sentir y vivir muchas vidas ajenas.

Los libros te abren la mente y los ojos,

tu vida se abre a otra dimensión.

Te expandes y aprendes historias de otros

que son como espejos de gran reflexión.

Los libros son puertas que abren tu mente

y cuando tú escribes comprendes tu vida.

Nunca estarás solo cuando abres un libro,

él te dará siempre una gran bienvenida.

Es tiempo de dragones y astronaves,

que nos llevan a mundos nunca imaginados

para hacernos con ellos inmortales,

descubriendo dimensiones de lo humano.

Puedes vivir miles de experiencias.

Puedes crecer entre dos mundos,

descubrir los secretos de las ciencias,

soltar tu ignorancia en un segundo.

Si aún no has volado con tu mente,

ni descubierto lo que otros han vivido,

si no te interesa saber lo que eres,

es que su poder no lo has comprendido.

Al terminar de leer el poema que había encontrado entre las páginas del libro que le había prestado su mejor amiga, Isabel se quedó pensativa. ¿Tendrían tanto poder los libros? ¿Serían capaces de ayudarla en la situación en la que se encontraba? ¿Cómo un libro escrito hacía tanto tiempo podía ayudarla en ese momento específico de su vida? Se sentía tan perdida...

Decidió probar. Tomó el libro y lo abrió en una página, al azar. Leyó unas líneas y, justo en ellas encontró la respuesta a una de sus preguntas. Seguro fue pura casualidad, pensó. Pero cuando cerró el libro y volvió a abrirlo sin elegir ninguna página, sucedió lo mismo.

Entonces, no tuvo más remedio que aceptar la evidencia: todos los libros narran historias que, de una forma u otra, tocan a quienes los leen. Cada libro es único. Cada libro contiene fórmulas diferentes. Cada libro tiene soluciones o caminos que se abren al lector para que este vea reflejada alguna parte de su vida, de su pequeño o gran laberinto.

Isabel estaba segura de que ella nunca experimentaría tantas aventuras, pero descubrió, a través de la lectura, que vivir era la aventura más grande de todas y que cada quien puede escribir su propia historia, aunque nunca se exponga en una librería.

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